San Juanak Eibarren Jaiak

San Juan es magia, diversión y felicidad pero también esperanza, purificación y renovación.

Milenios a, un grupo de homo sapiens prehistóricos observaron los ciclos vitales de la naturaleza. El sol viene y se va, como lo hace Amón-Ra para los egipcios, pero en este caso se fijaron en la larga duración. Tal que la noche, del dia hoy conocido como "20 al 21 de junio", retrasaba bastante su llegada y cuando lo hacía era de manera efímera, no en sensu stricto de la palabra, como resulta evidente.

El frio, los abrigos cosidos de piel de fiera de época solutrea quedan atrás. El agotador trabajo de agricultor va desapareciendo y se llega a una época de un mayor descanso. Sin embargo, con todo su desconocimiento, no sabían que es lo que movía (y quizás nosotros sigamos sin saber) al señor de la Vida y de la Luz a volver a diario, o a reponer su fuerza y volver después del solsticio de invierno.

El miedo obligó les indujo a crear hogueras en las que hacían de manera artificial lo que él les brindaba naturalmente a diario, vida a sus cosechas, calor a su familia y luz. Pero también vieron que no sólo era un fin de un ciclo solar, sino que la fuerza del sol hacía que el mundo variara y que tras este dia en el que el sol necesitaba de un ahorro de fuerzas para volver la naturaleza era igual y tras la cosecha viene un largo verano en el que no se puede trabajar la tierra.

Ese renacer solar y terrenal implicaba una muerte para una resurreción. Ellos, en su partícular culto, trataban de hacer lo mismo. Tras meses de duro trabajo llegaba su descanso, había que quemar lo antiguo para que se purificara y llegaran nuevas oportunidades, por lo que lanzaban lo que creyesen conveniente a las hogueras ya que el fuego lo limpia y lo purifica todo, además de que ahuyenta a las fieras.

Viendo que el dia es el más largo y la noche más corta, ¿Por qué no unir los dos días más largos con luz artificial?

Sin lugar a dudas la pena llegó con la Iglesia, como no, el mayor órgano represor del mundo. Tras sufrir duros castigos, cuando llegó al poder esta religión de perdón, amistad y amor, se lanzó a la yugular de los ritos paganos ya fuera asfixiándolos completamente o poniéndole nombres propios y adueñándose de ellos. De este modo se apoderó un tal Juan Bautista de tan magno momento.

No fue el único. El otro solsticio pagano se lo quedó un tal Jesús de Nazaret.La luz que vence a la oscuridad fue lo que le sirvió a Juan Crisóstomo y en mayor medida a un Papa posterior para destrozar el culto Natalis Solis Invictus que a su vez habían destrozado los romanos a pueblos prehistóricos que veían que su Dios Sol renacía y haría florecer sus cosechas para darles comida.

Hoy en día no nos encontramos mucho más allá. Tras ver ayer la hoguera sita en la ciudad deportiva observé una nueva aculturación de un rito milenario que pierde su carácter adaptándose al momento en el que vive, olvidándo su fin. Casualmente la única tradición medio conservada de quemar lo antiguo para que vengan cosas nuevas purificadas se conserva. Gracias mundo capitalista. Pero con una música "celta" por altavoces respetamos al Dios sol, que dará la época de más calor del año para ir ocultándose hasta que de en ... ¿El nacimiento de Cristo? ... su contrario completo.